La historia transcurre en un mundo apocalíptico arrasado por una guerra nuclear, en el que un padre y su hijo viajan hacia la costa para buscar un lugar seguro donde asentarse, luego de la devastación total. Durante su travesía se cruzarán con los pocos seres humanos que quedan vivos sobre la faz de la Tierra, la mayoría de los cuales, o bien se han vuelto locos, o se han convertido en caníbales, ansiosos por alimentar sus apetitos de la manera más brutal y salvaje posible.