Frank Falenczyk le encanta su trabajo como asesino a sueldo para una familia de la mafia. Pero él tiene problemas con el alcohol y cuando echa a perder un trabajo, su familia se convierte en un blanco para el crimen. Obligado a mudarse, Frank comienza a enderezar su vida, con un trabajo de fachada y sobriedad. Luego conoce a Laurel, una mujer un poco posesiva. Mientras tanto, las cosas en Buffalo no van muy bien pues el negocio familiar se ve amenazado y Frank debe regresar a ajustar cuentas junto con Laurel, quien se ha convertido en su nueva asistente
